Redacción
Alicia Arellano Tapia dejó huella e hizo historia en México,
al abrir la brecha para que muchas otras mujeres pudieran transitar con menos
dificultad en la vida política del país, en el cual hace 59 años, se reconoció
el derecho al voto femenino.
Así se expresó la senadora por Sonora, Claudia Pavlovich
Arellano de su señora madre, quien fue recordada junto con María Lavalle Urbina
como las dos primeras senadoras que tuvo nuestro país.
En una emotiva ceremonia realizada en el Senado de la República,
donde a partir de este miércoles, el salón cuatro del edificio central de la
Cámara Alta lleva el nombre de las dos ex legisladoras, Pavlovich Arellano
destacó el carácter, la entereza y decisión de su mamá, quien siempre, supo
encontrar el camino para realizar el sueño de su vida: servir a su país y
construir para las futuras generaciones.
“Quiero reconocer a Alicia Arellano, la mujer, la madre, la
que me enseñó mis primeras letras, la que estuvo presente en mis momentos
alegres y también en los amargos. Quiero reconocer a la madre de quien aprendí
los valores de la honestidad, del trabajo, la congruencia, la responsabilidad y
la determinación”, manifestó la senadora priísta.
Ante los coordinadores parlamentarios del PRI, PAN y PRD,
así como de la presidenta de la Comisión de Equidad y Género del Senado, Diva
Hadamira Gastélum Bajo, legisladoras de diferentes partidos, amigos y
familiares de las homenajeadas, Pavlovich Arellano destacó que después de casi
30 años de haberse retirado de la actividad pública, su madre doña Alicia sigue
vigente en los corazones de los sonorenses y de los mexicanos.
Al respecto, resaltó que la vigencia es un privilegio de
quien deja huella para siempre y prueba de ello, es que con ella “aprendí que
la política es sólo un medio y que el fin es la gente. Aprendí con ella que la
política que sirve es aquella que le sirve a la gente”.
Al atestiguar la revelación de la placa en honor a las dos
primeras senadoras de la República, el presidente de la Junta de Coordinación
Política, Emilio Gamboa Patrón, calificó a Alicia Arellano como una mujer
talentosa, preparada, entusiasta, quien se caracterizó por siempre pensar en
ayudar a los que menos tienen.
Asimismo recordó que cuando era secretario particular del
Presidente, la joven Alicia Arellano, iba, tocaba y decía: “Cómo podemos sacar
adelante a este país que vive momentos muy complejos y difíciles”, como fueron
los años 1982 y 1988.
Por ello, Alicia, primera Senadora junto con María Lavalle,
representan el símbolo de lo que puede hacer la mujer mexicana cuando así se
compromete y lo desea.
Por eso, continúo el Senador Gamboa Patrón, le decimos a
través de su hija Claudia, que se mejore, que la queremos viva; que nos siga
enseñando ese bagaje enorme de política que aprendió durante muchos años
durante los cuales, “tengo la oportunidad y privilegio de conocerla”.
elinformante
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