Redacción
Hermosillo, Sonora.- Con el compromiso de seguir brindando un espacio digno a niñas, niños y adolescentes en situación de migración, se cumplió el primer año de operación del único albergue de puertas abiertas del país, Tin Otoch, informó Karina Zárate Félix, directora del DIF Sonora.
Durante la celebración, señaló que este proyecto fue el primero de su tipo en México, con atención prioritaria para quienes proceden principalmente de Centroamérica, lo cual fue reconocido por organismos internacionales como el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
En este primer año, precisó, atendieron a 236 personas, de las cuales 211 son niñas, niños y adolescentes y 25 madres de familia; los países de origen son: Guatemala con 169 personas, Honduras con 53, El Salvador con 11, Nicaragua con 1 y Ecuador con 2 casos.
“Hemos trabajado con mucho entusiasmo y, sobre todo, con mucho amor porque queremos que nuestros visitantes olviden el sabor amargo que pudieron tener en su viaje y se queden con la sensación de que en Sonora siempre serán bien recibidos”, enfatizó Zárate Félix.
Explicó que, desde su inicio el albergue ha mejorado constantemente los servicios que brinda, siempre conservando los lineamientos de respeto a los derechos humanos, de tal forma que buscan sumar la asistencia educativa, para que las niñas, niños y jóvenes continúen su preparación académica.
En el evento, al cual asistió Wenceslao Cota Amador, procurador de Protección a Niñas, Niños y Adolescentes, y Susana Flores, directora operativa de Tin Otoch, se hizo un reconocimiento a la calidez del equipo de servidores públicos que forman parte de este proyecto, el cual inició con una inversión histórica superior a los 25 millones de pesos.
Edwin Arturo M., originario de El Salvador, ingresó el pasado 2 de agosto al albergue y agradeció el trato digno y de respeto recibido durante su estancia.
“Acá me he sentido como en casa, desde que llegamos nos recibieron y explicaron dónde nos quedaríamos y las atenciones que íbamos a recibir, personalmente le agradezco esto directora, porque sin este albergue no sé dónde estaríamos ahora mi familia y yo, gracias también a todo el equipo que nos trata con mucho cariño, nos hacen sentir como en casa”, dijo el joven de 16 años.
“Tin Otoch”, que significa “Mi Casa” en lengua Maya, promueve un trato digno, amable, con respeto; incluye programas con fines educativos, recreativos, culturales y deportivos, así como el fortalecimiento de la integración familiar, por lo cual se recibe en acompañamiento a las madres de familia.
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